Forros polares:
Segunda capa:
Como ya hemos visto en la sección de la «parte superior», los forros polares son la prenda que conformaría la segunda capa en nuestra vestimenta de montaña y esta sirve para dar calor a nuestro cuerpo.
Menor o mayor grosor:
Dependiendo de la actividad a realizar y sobre todo por las franjas de temperatura que se den donde vayamos a realizarla, deberemos elegir unas con un menor o mayor grosor.
Existen tres pesos y grosores diferentes:
100 gramos: Un forro polar de 100 gramos es ligero y muy recomendable para realizar rutas de senderismo o actividad en montaña con temperaturas ambiente o sensación térmica que se encuentre entre los + 15 grados y hasta los + 5 grados positivos.
200 gramos: Los forros polares de 200 gramos son los mas comunes y mas usados en el mundo de la montaña ya que tienen un peso medio y nos sirven perfectamente para las temperaturas invernales normales en esta época del año en nuestro país + 5 grados positivos a – 5 grados negativos.
300 gramos: Los forros polares de 300 gramos son mas pesados y menos adaptables pero se deben utilizar donde el calor sea nuestra prioridad absoluta, como actividades de alta montaña y con temperaturas extremas que bajen de los – 5 grados negativos.
Sensación personal al frio:
En lo expuesto anteriormente tendremos en cuenta nuestro grado personal de sensación de frío y también el resto de prendas a utilizar como la camiseta térmica como primera capa y una chaqueta técnica como tercera capa.
Quitar y poner mejor esta segunda capa:
La mejor opción es jugar siempre con esta capa (Forro polar) quitándola o poniéndola según la sensación térmica, momentos de baja actividad, paradas o situaciones mas extremas en lugar de hacerlo con la tercera capa o chaqueta.
Forro polar montañismo Mujer:
Forro polar montañismo Hombre:
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